Ayuda a la persona a solucionar problemas y tomar decisiones, favorece la confianza y desarrollo personal.
Ayuda a la formación de líderes, mejora las habilidades de comunicación y de manejo de conflictos y aumenta el nivel de satisfacción en el puesto.
Ayuda a lograr las metas individuales, favorece un sentido de progreso en el trabajo y como persona.
Disminuye temores de incompetencia o ignorancia y favorece la promoción hacia puestos de mayor responsabilidad además de mejorar el desempeño.